Al Señorío de Sarría no solo se va a disfrutar del vino; también se celebran bodas que son todo un espectáculo, como la de Iranzu & Javier. Con los viñedos Señorío de Sarría (Puente la Reina, Navarra) de fondo, esta pareja convirtió su gran día en algo único, lleno de emociones y un par de momentos que nos sacaron carcajadas.

La ceremonia civil al aire libre fue tan mágica como impredecible. Entre lecturas de amigos y amigas que arrancaron alguna lágrima y un intercambio de anillos que provocó unas buenas risas, la boda avanzaba con esa mezcla de solemnidad y buen humor que solo ellos y ellas podían lograr.

Después de los «sí, quiero», nos adentramos con cuidado entre los viñedos para capturar imágenes que, sinceramente, parecen sacadas de una película romántica (de las buenas, no las empalagosas). Aunque el cielo parecía amenazante, el tiempo se mantuvo perfecto. Iranzu & Javier, siempre con ese toque especial, decidieron improvisar unos pasos de baile… ¡Qué manera de personalizar el reportaje!

La tarde continuó con risas, abrazos y… muchas fotos de grupo. Y cuando digo muchas, quiero decir que casi necesitábamos un croquis para organizar a todas las familias, amigos y amigas. Al final, con paciencia y buen humor, logramos fotos increíbles que reflejan la alegría de todos y todas los/as presentes.

Nuestra jornada terminó cuando la pareja se sentó en la mesa principal y dio un breve, pero emocionante discurso. ¿Y el baile y la fiesta? Como dice la frase: “Lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas”. Solo nos queda confiar en los relatos de Iranzu & Javier para saber qué ocurrió después.